A través de esta terapia integradora, podremos descubrir cómo cualquier conflicto está vinculado a nuestro sistema familiar de origen (padres, abuelos...) bloqueando algún aspecto de nuestra vida (laboral, económico, social, familiar, salud...).

Las constelaciones familiares nos permiten ver cómo nos ubicamos ante la situación conflictiva y las dinámicas e implicaciones ocultas que están presentes, viéndolas como observadores para una mayor comprensión.

Además, esta herramienta nos ofrece también un camino de solución para comenzar acciones hacia el cambio.

El que no conoce su historia tiende a repetirla. Bert Hellinger.

Objetivos

• Comprender el origen del conflicto o problema para reconciliarnos con la situación.
• Poner orden y amor en los conflictos latentes del sistema familiar que nos involucran a día de hoy.
• Observar desde fuera cómo estamos posicionados ante lo que nos pasa y así responsabilizarnos de nuestra situación.
• Recuperar fuerza para vivir con más plenitud.
• Descubrir posibles soluciones que nos encaminen hacia un cambio duradero.
• Estar en paz con la vida, nuestros padres y nosotr@s mism@s.
• Liberar los conflictos de tensión, incomprensión y angustia para calmar nuestro corazón y nuestra vida.
• Ser conscientes de nuestro rol ante la situación problemática para integrarla o liberarla. 

Los Órdenes del Amor

Los Órdenes del Amor son los principios básicos que rigen los sistemas humanos. Son leyes naturales que tienden a generar orden en las relaciones y según observó Bert Hellinger, están presentes en todos los ámbitos de nuestra vida (en el trabajo, en las relaciones de pareja...)

La transgresión de estos órdenes es origen de sufrimiento, conflictos y discordancias internas que pueden manifestarse en diferentes patologías tanto físicas como psíquicas.

En las constelaciones familiares tratamos de ordenar el sistema familiar teniendo en cuenta los 3 principios de los Órdenes del Amor:

1. Todo aquel que pertenece al sistema tiene derecho a pertenecer a él. Todos aquellos que pertenecen a nuestra familia han de tener un lugar en nuestro corazón sin excluir a nadie. La exclusión de un miembro genera malestar y sufrimiento.
2. El miembro que llegó antes tiene prioridad sobre el que llegó después. Cada persona del sistema familiar ha de ocupar el lugar que le corresponde para vivir en armonía. Si no es así, ocuparemos roles en nuestras relaciones que nos hacen sufrir.
3. El equilibrio entre el dar y el recibir en las relaciones. Si no hay un flujo constante de esta dinámica, las relaciones se estancan y desordenan.

Frecuentemente estos principios no se respetan y podemos ver la consecuencia de esto en los efectos que tiene sobre las personas del sistema familiar: enfermedades, sufrimiento, vacío, carencia económica...

En las Constelaciones familiares damos luz a estos desórdenes para trabajar con ellos y así generar movimientos de solución.

Cuando estos órdenes son respetados, el amor puede fluir libremente y sentirnos apoyados por nuestras raíces, las cuales nos mantienen fuertes y estables independientemente de los retos y dificultades que nos encontremos en el camino.